La firma tecnológica tendrá ahí un Centro de Investigación y Desarrollo donde 30 profesionales desarrollarán soluciones para las necesidades locales.
La empresa brasileña de software Totvs eligió a la ciudad de Querétaro como su polo de innovación para el mercado mexicano.
La firma tecnológica tendrá en esta ciudad un Centro de Investigación y Desarrollo, donde 30 profesionales estarán dedicados a trabajar a desarrollar soluciones para las necesidades locales.
El equipo responsable del centro de I+D de la multinacional, aquí en México, está compuesto por desarrolladores, investigadores, líderes de equipo, líderes de producto y expertos en metodologías ágiles.
La diversidad de conocimientos, combinada con las grandes inversiones anuales de la empresa en I+D (más de US$340 millones en los últimos cinco años), son clave para optimizar y agilizar las actualizaciones, customizaciones e innovaciones de productos para satisfacer eficientemente las necesidades particulares de las empresas mexicanas. Por esto que «el principal objetivo de tener un centro de Investigación y Desarrollo en México es, de hecho, evolucionar nuestras soluciones considerando la realidad de aquí y la de también otros países de América Latina, desde el punto de vista de los requisitos legales como de funcionalidades vinculadas a la actual operación del país y la región», explicó Damián Malfatti, director de Totvs México.
Las demandas atendidas por el centro de I+D, en Querétaro, siguen un proceso que tiene como primer paso identificar las particularidades de cada país latinoamericano donde la empresa tiene clientes, considerando las características específicas de los perfiles de estas empresas que atiende la firma brasileña, que considera que «la ventaja de contar con un polo de innovación propio y localizado es precisamente comprender y atender a las cuestiones fiscales y legales de cada país, tanto en las rutinas de back office, vinculadas a las actividades administrativo-financieras, como en las operaciones core de las empresas».
«La agroindustria, por ejemplo, tiene procesos muy diferentes a los del sector manufacturero o de construcción. Además, cada país tiene sus propias regulaciones, no solo en las declaraciones de impuestos, sino también en las reglas de comercio exterior, formatos de timbrados electrónicos utilizados e incluso monedas y medios de facturación. El hecho de que tengamos un centro de I+D de Totvs aquí nos da la proximidad y el conocimiento para brindar la mejor atención a las empresas locales», resaltó Malfatti.
Recientemente, por ejemplo, Totvs puso a disposición actualizaciones en sus soluciones para México, las cuales impactaron en la factura electrónica para el transporte de mercancías, y también para Colombia, que ahora requiere la emisión y envío electrónico de la nómina. «Sin esta actualización, realizada por el centro de I+D de Querétaro, una empresa mexicana podría verse impedida de transportar productos y parar por completo su operación, con pérdidas irreparables. El mismo riesgo corrían las empresas colombianas, que también debían adaptarse a la nueva legislación local», concluyó Malfatti.
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