Los países miembros de la Alianza del Pacífico, con sus más de 230 millones de habitantes, albergan 1.102 fintech identificadas, el 47% de las que existen en América Latina, y 1,4 veces superior al número de compañías de este tipo que actualmente operan en Brasil. México y Colombia lideran en número de fintechs y regulación; Perú y Chile crecen vertiginosamente; Perú y Colombia lideran en cuanto a inclusión financiera.
La carrera por el control de los servicios financieros en América Latina vive su momento peak, con los emprendimientos que pertenecen a los países de la Alianza del Pacífico empujando con fuerza para hacerse de la punta de la competencia. Es así cómo los emprendimientos de estos países crecen conjuntamente a un ritmo del 25% anual a partir de los múltiples factores que han propiciado la sofisticación del ecosistema, y a pesar de que los servicios financieros todavía son controlados por la banca tradicional: se estima que los 3 bancos más grandes que operan en cada país concentran en promedio el 60% de la cuota de mercado.
El estudio Radar Fintech e Incumbentes, realizado por Finnovista, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la Presidencia Pro Tempore de la Alianza del Pacifico, mide el fenómeno y mapea el panorama de la industria para México, Colombia, Chile y el Perú; asimismo, analiza la transformación financiera en la región de forma simultánea e integral, al incluir por primera vez, tanto a las entidades fintech como a las instituciones financieras reguladas (banca tradicional) de los 4 países miembros de la Alianza del Pacifico: Chile, Colombia, México y Perú.
La muestra aleatoria de 342 compañías fintech es representativa del 30% del universo fintech en los países de la Alianza, y este año el estudio suma a 71 instituciones financieras reguladas en Chile, Colombia, México y Perú.
En Tekios resumimos los principales hallazgos del estudio, las similitudes y diferencias entre los países de la Alianza, y señalamos quiénes son los países que destacan en crecimiento, regulación e inclusión financiera.
«Los resultados revelan la consolidación que se vienen dando en la digitalización, la presencia de más dinámicas de sinergia entre el sector financiero y fintech, la renovación de la oferta y canales en prácticamente todas las verticales financieras, las oportunidades alrededor de los datos y los desafíos que todos estos cambios generan para los reguladores», dice Felipe Lega, director general de la Unidad de Proyección Normativa y Estudios de Regulación Financiera, URF en Colombia.
«En la Alianza del Pacífico empiezan a proliferar startups tecnológicas que desarrollan la infraestructura y los plug-ins que permitirán que empresas tecnológicas de diferentes industrias puedan embeber servicios financieros en su oferta actual. Y es aquí donde está la mayor oportunidad para democratizar el acceso a los servicios financieros y, por fin, apoyar en iniciativas que acelerarán la inclusión financiera con mucho más impacto que el que hemos visto en los primeros años de Fintech», agrega Andrés Fontao, cofundador & Managing Partner de Finnovista.
EL DESARROLLO DEL ECOSISTEMA ALIANZA PACÍFICO
Si bien México y Colombia concentran más del 70% de las startups de tecnología financiera en la Alianza del Pacífico, Chile y Perú han registrado tasas de crecimiento importantes en los últimos años. En Chile, por ejemplo, el ecosistema creció 38% en el último año, en términos de número de empresas operando en el mercado local. Perú sostiene un crecimiento espectacular desde el último dato publicado por Finnovista en 2017. En dicho año, se identificaron 47 startups fintech en el ecosistema, hoy se contabilizan 132. «El ecosistema casi triplicó su tamaño en tan solo cuatro años», destaca el estudio. En México, el crecimiento fue de 16% anual, para un total de 512empresas. Para Colombia, el crecimiento fue de 39%, sumando así a 279 emprendimientos.
En cuanto al estado de desarrollo de la oferta fintech en la región, la mayor parte de las fintechs reportaron encontrarse en estado de crecimiento (58%), seguidas de las que señalaron encontrarse en proceso de introducción al mercado (28 %). El 7% y 6% consideran estar en etapas de madurez y de producto mínimo viable, respectivamente.
La fintech promedio en la región tiene 4,6 años de operación y el principal desafío es el escalamiento de operaciones e internacionalización. Colombia es el país donde el promedio de edad de las startups es el más alto (casi 6 años de operación).
Los tipos de soluciones de tecnología financiera que prevalecen en la Alianza del Pacífico son Préstamos, Pagos y Remesas, y Tecnologías Empresariales para Instituciones Financieras. «Este último segmento es congruente con lo encontrado en el estudio aplicado a 71 incumbentes de la industria financiera de la región, pues al menos la mitad de las instituciones financieras encuestadas afirman que adquieren tecnología para mejorar su oferta de productos y servicios como parte de su estrategia fintech», dice el estudio.
Por primera vez el segmento de Préstamos superó al de Pagos y Remesas, siguiendo la tendencia global de fintech. El segmento de Empresas de Tecnología para Instituciones Financieras es el tercero más importante de la región. El estudio destaca que las empresas de Finanzas Abiertas representan solo el 3% del total de startups fintech en toda la Alianza del Pacífico, cuando estas tienen un impacto importante en el desarrollo del sector, pues habilitan la creación de ecosistemas de datos financieros abiertos. Este tipo de empresas representan el 6% del sector fintech en Colombia, por ejemplo.
Existen similitudes en la composición del ecosistema fintech en los países de la Alianza del Pacífico, entre los que resaltan el dominio de las soluciones de crédito y pagos, especialmente en Colombia y Perú, así como una masa crítica importante de Tecnologías para Instituciones Financieras y herramientas de Gestión de Finanzas Empresariales.
Y también existen diferencias. En Perú existe un mayor porcentaje de soluciones de Bienestar Financiero (12%) si se compara con los demás países. Algo similar ocurre en Chile con las soluciones de Gestión de Finanzas Empresariales, pues es el país con mayor porcentaje (20%) de este tipo de startups entre los países de la Alianza.
FINTECH VS. BANCA TRADICIONAL
Otro de los objetivos del estudio fue analizar las relaciones de colaboración y competencia entre las fintechs y las instituciones financieras tradicionales. Se encontró que 6 de cada 10 empresas fintech en la Alianza Pacífico están actualmente colaborando con instituciones financieras incumbentes, predominantemente en alianzas comerciales, especialmente aquellas en las que las Fintech proveen servicios a las entidades incumbentes. Por otro lado, se encontró que el 27% de las startups en la región señaló a los incumbentes como su principal competencia.
En cuanto a los bancos encuestados se halló que tan sólo el 14% de ellos tiene su principal foco en proveer servicios financieros a pequeñas y medianas empresas. De esta manera, cobra relevancia la tesis de que las soluciones fintech se han especializado en ofrecer estos servicios a este mercado desatendido.
A pesar de que las instituciones financieras incumbentes han buscado acelerar sus procesos de transformación digital y el 17% de las entidades encuestadas señaló desarrollar su propio producto fintech, también existe la intención de involucramiento con el ecosistema. El 52% de los incumbentes adquiere tecnología para mejorar su oferta de servicios, mientras que sólo el 7% está involucrado en programas formales para incubar y acelerar startups fintech. «Esto tiene que ver con la sensación por parte de las Fintech de un sentido de colaboración débil entre ellas y los incumbentes», explica el estudio.
INVERSIÓN E INCLUSIÓN FINANCIERA
El 56% de las startups fintech encuestadas señalaron haber recibido capital por parte de terceros aunque el estudio asegura que el levantamiento de capital sigue siendo uno de los principales desafíos mencionados por las fintechs. Las fuentes de capital prevalentes en el ecosistema de emprendimiento fintech de la Alianza del Pacífico son los inversionistas ángeles, los fondos de capital riesgo y el entorno personal de los emprendedores.
Se estima que en la Alianza del Pacífico las fintechs extranjeras representan 7% del mercado, en términos de número de empresas operando en los cuatro mercados locales de la alianza. El estudio destaca la presencia de emprendimientos fintech provenientes de Argentina (39%), Estados Unidos (26%) y España (22%), especialmente en México y Colombia.
En cuanto a inclusión financiera, el informe revela que los países donde más startups fintech dirigen sus soluciones a personas no bancarizadas son Colombia (27%) y Perú (29%).
Solo 1 de cada 10 empresas afirma que menos del 10% de los usuarios que atienden contaba con una cuenta de banco antes de comenzar a usar su solución; y 8 de cada 10 usuarios de las empresas fintech de la Alianza Pacífico ya contaban con una cuenta bancaria antes de convertirse en clientes fintech. «Esto es de suma importancia en países como México, donde se estima que el porcentaje de personas en el sistema financiero ronda el 56%», asegura el estudio.
Chile es el país de la Alianza del Pacífico donde una mayor proporción de startups se dirigen al sector pyme no bancarizado, lo que refuerza la teoría de que ahí las fintechs están enfocadas en proveer servicios financieros a empresas, cuenten o no con productos financieros de la banca (el 38% de las empresas fintech en Chile dirigen sus soluciones al sector de las pymes aunque estas ya cuenten con productos financieros provistos por los bancos). En México, el porcentaje de startups fintech que atienden al sector pyme suma apenas 28%, lo cual representa una oportunidad para ese mercado.
En promedio, 4 de cada 10 startups fintech en la Alianza del Pacífico dirigen sus soluciones a otras empresas (B2B), mientras que 29% afirma atender directamente a usuarios (B2C).
LA PANDEMIA SUMÓ
La investigación asegura que la pandemia fue un catalizador de usuarios e ingresos, «lo que se ha traducido en el desarrollo de dichas soluciones y, sobre todo, en el creciente interés de la comunidad de inversionistas en este sector».
El estudio halló que 6 de cada 10 fintechs se beneficiaron de las medidas de confinamiento por la pandemia, ya que sus usuarios e ingresos incrementaron. Además, el 76% de las entidades afirmó que el uso de estos aumentó por parte de los usuarios en el último año. Sólo 15% de las startups de la muestra afirman que la pandemia tuvo efectos negativos en su empresa por la disminución de usuarios e ingresos.
Si bien la pandemia tuvo un impacto positivo en el sector, en general, las preocupaciones sobre la vulnerabilidad cibernética de los usuarios se incrementó.
MÉXICO Y COLOMBIA A LA CABEZA EN REGULACIÓN
Aunque cada uno de los países que integran la Alianza Pacífico cuentan con un esquema diferente, los reguladores en México y Colombia lideran avances importantes de ciertas verticales fintech, tales como pagos y financiamiento colectivo.
Recientemente el gobierno de Chile ha enviado al Congreso un Proyecto de Ley de Innovación y Finanzas Abiertas para ser aprobado, por lo que se espera que el crecimiento de este sector se acelere aún más en el país.
El 42% de la muestra afirma que la regulación es adecuada; sin embargo, el 53% y 32% de las empresas en Chile y Perú, respectivamente, indica que no existe regulación y sí se requiere.
Con respecto al sandbox regulatorio y el hub de innovación como iniciativas necesarias para el desarrollo del sector, hubo una respuesta casi unánime, pues 9 de cada 10 consideran que son relevantes para la industria. México y Colombia lideran también en cuanto al desarrollo de estas herramientas.
Las entidades financieras reguladas se encuentran en espera de actualizaciones que beneficien al sector, ante el crecimiento de la demanda de servicios cada vez más sofisticados por parte de los usuarios. La mayoría de las entidades financieras reguladas en la Alianza del Pacífico se encuentran optimistas de cara a las consecuencias que traería un marco normativo de Finanzas Abiertas, pues el 65% señaló que estas «tendrán un impacto positivo, aunque representan retos para su implementación», y el 31% que, «sin dudas traerá un impacto positivo a la industria». Solo el 4% señaló que esto no no tendrá un impacto positivo pues solo representa una carga regulatoria adicional.
«Si bien aún existen oportunidades de mejora regulatoria en materia de tecnología financiera en los países de la Alianza del Pacífico, entre las que se encuentran disposiciones de Finanzas Abiertas y regulación específica para verticales como Gestión Patrimonial digital, los países de la AP –Chile, Colombia, México y Perú– han sentado ya las bases para seguir fomentando la innovación en el sector financiero», concluye el estudio.
*Encuentre aquí el documento completo y un análisis país por país.
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