Esta participación permitirá expandir la compañía a todas las ciudades de Perú y a nivel regional en Colombia, México y Chile.
El laboratorio de innovación del Banco Interamericano de Desarrollo, BID Lab, invirtió US$1 millón en Sugo Company, una startup de tecnología climática de origen peruano que ofrece soluciones para generar valor tangible en los residuos.
BID Lab es el laboratorio de innovación del Grupo BID, la principal fuente de financiamiento y conocimiento para el desarrollo enfocada en mejorar vidas en América Latina y el Caribe.
La inversión de BID Lab se suma a una ronda semilla de US$5,5 millones en la que participan otros inversores líderes de la región, como Nazca y Femsa Ventures.
Esta participación permitirá expandir la compañía a todas las ciudades de Perú y a nivel regional en Colombia, México y Chile, y promover la economía circular.
Para incentivar un mundo sin desperdicios, Sugo Company, nacida en 2019, ha desarrollado dos productos que materializan e incentivan la agenda del desperdicio cero: Sugo Store, una tienda online que comercializa exclusivamente lotes de vencimiento próximo, de inventario excedente, con fallas estéticas, o de lenta rotación con descuentos; y CoreZero, una plataforma de servicios de gestión, cuantificación y autentificación que permite a las compañías que están detrás de esos esfuerzos de reducción de residuos obtener una equivalencia de su impacto en unidades de CO2, plataforma que Sugo espera integrar con socios estratégicos de la región y de Estados Unidos, con esta inyección de capital, creando los primeros créditos al carbono producto de la disminución de descartes.
Anualmente se desperdician en el mundo millones de toneladas de comida y productos de consumo masivo que todavía se encuentran en un estado aprovechable. En América Latina cerca del 10% de la producción minorista total corre el riesgo de ser descartada, y el impacto del desperdicio mundial de alimentos representa el 8% del total de las emisiones de gases de efecto invernadero que aceleran el calentamiento global.
A través de este proyecto se espera rescatar del descarte más de 65 millones de productos, lo que generaría un ahorro económico de US$137 millones para los consumidores, así como evitar la emisión de 8 millones de toneladas anuales de emisiones de CO2 en la lucha contra el cambio climático.
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