Por José Ignacio Bernal, Director Ejecutivo de Rappi para la Región Pacífico.
Recientemente cumplimos 4 años desde que Rappi aterrizó en tierras chilenas con el objetivo de simplificar la vida de los usuarios. En aquel 2018, enfocábamos las estrategias en que las personas nos conocieran, en ganar su confianza, y en incorporar tiendas a la oferta de la app para que incrementaran sus ventas, realizarán entregas y obtuvieran ingresos extra, tal como ya había ocurrido en otros países de Latinoamérica.
Poco a poco las personas fueron (re)descubriendo las ventajas del comercio electrónico, y con ello, reconociendo a nuestra aplicación como un facilitador para realizar sus compras. Y en medio, llegó la pandemia, exigiendo adaptabilidad y agilidad para poder dar respuesta al impulso que vivió este sector mediante la necesidad de compras más seguras.
Según datos de la Cámara de Comercio de Santiago y Kawesqar, el confinamiento llevó a que cerca del 80% de los usuarios compraran bajo la modalidad online y hoy, de vuelta a la movilidad plena, las tasas de penetración vuelven a acercarse a ese peak (79%).
Es un hecho que en el mundo de la tecnología y del emprendimiento los cambios suceden muy rápido, por eso hay que estar atentos para girar el timón en el momento justo y nunca perder la capacidad de innovar. En este mercado, por ejemplo, vemos un nuevo elemento que marca un punto de inflexión y es decisor al momento de comprar: la preferencia por una entrega de producto más veloz. Así lo entendimos y por eso desarrollamos y trajimos el concepto de entregas ultra-rápidas al país.
A la vez, ante la inmensa cantidad de aplicaciones que están presentes en el mundo, para las personas es trascendental contar con una que resuelva sus diferentes instancias de consumo. A través de nuestra app, el usuario puede pedir comida, hacer las compras del supermercado, farmacias, o incluso planificar sus vacaciones o pagar con la RappiCard. Esa posibilidad de encontrar una respuesta a diferentes necesidades en una sola plataforma es lo que llamamos multiverticalidad. Este concepto se ha transformado en nuestro eje central, con lo que facilitamos la vida al usuario.
Los cambios seguirán viniendo, por eso la mentalidad emprendedora debe estar presente a todo momento, al igual que la capacidad de adaptarnos rápidamente. Pero algo que será constante es nuestro compromiso de contribuir a través de la tecnología para generar fuentes de empleo, apoyar a las pymes y que los usuarios encuentren en la multiverticalidad la respuesta a sus necesidades de compra.
¿Qué veremos dentro de 4 años?, ¿cuáles serán las nuevas necesidades y hábitos que desarrollarán las personas en un futuro? En el mundo del emprendimiento, todas estas preguntas revolotean por la mente de quienes trabajamos en tecnología. Y surgen esas proyecciones, sueños y posibilidades que alguna vez leímos o vimos relacionadas a la ciencia ficción, pero que hoy ya van tomando forma. En 4 años más, todo aquello puede llegar a suceder si continuamos conectados con lo que el usuario demanda, y encontramos en los desarrollos tecnológicos la forma de dar una respuesta efectiva.
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