Los inversores Oak HC/FT, Kaszek y Picus Capital también participaron en la ronda que se suma al financiamiento puente que la compañía recaudó desde su Serie A de $27 millones en 2021. En total, la empresa ha asegurado $100 millones en capital y $75 millones en deuda comprometida.
“Con esta inversión, buscamos avanzar aún más en nuestra misión y estamos tremendamente emocionados de dar la bienvenida a QED uno de los principales inversores fintech de consumo a nivel mundial como socio en este viaje”, dijo Ángel Peña, director ejecutivo de Aplazo.
IA y Compre ahora, Pague Después (BNPL) para bancarizar
La firma busca llegar cada vez más a las personas que no cuentan con una tarjeta de crédito; un 88% de los mexicanos. Además, la tecnología mantiene confianza en el impulso de este método de pago, debido a que sus socios reportan que su ticket promedio aumenta hasta un 60% y la tasa de conversión un 30%, tras la aceptación de BNPL.
Según datos de la firma, un 70% de sus usuarios no cuentan con algún otro producto, mientras que un 40% por ciento de los usuarios de Aplazo no tienen historial crediticio, la empresa mantiene una tasa de aprobación de crédito superior al 80 por ciento.
La rápida expansión de Aplazo en el mercado de tiendas en línea y físicas ha sido un impulsor clave de su crecimiento. Las transacciones en tiendas ahora constituyen más de la mitad de las operaciones de la plataforma.
La empresa también ha podido utilizar datos y tecnología para limitar las pérdidas crediticias a pesar de su crecimiento, dijo el CEO de Aplazo, Ángel Peña, a TechCrunch. «Toda la organización tiene la inteligencia artificial incrustada en su ADN y es algo que ha traído una tremenda eficiencia en el último año. Para ponerlo en contexto, hemos reducido nuestras tasas de morosidad a la mitad mientras, en el mismo período, hemos triplicado el negocio. Eso definitivamente fue posible gracias a nuestra capacidad para utilizar la inteligencia artificial para evaluar cada transacción».
“En Aplazo nos propusimos convertirnos en el método de pago preferido en México a través de soluciones financieras justas, simples y transparentes, en lugar de productos crediticios tradicionales que atrapan a los usuarios en una trampa de deudas. Este comportamiento ha sido una práctica común en México durante las últimas décadas, y finalmente estamos poniendo al consumidor en el centro de nuestra oferta de soluciones de pago justas”, explicó Peña.
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